domingo, 10 de diciembre de 2017

Visita al Museo Arqueológico. Alejandro García Ordóñez, 1º Bachillerato

Hoy quiero hablaros de un hecho, para mí muy importante, que ocurrió en Córdoba. Estando en el museo arqueológico, cuando estaba alojado en el gran palacio renacentista de los Páez de Castilleja, me percaté de un horrible suceso, la Venus agachada o Afrodita agachada, mi pieza favorita del museo, estaba agrietándose debido a los cambios tan bruscos de temperatura en Córdoba . Como mi sentimiento hacia esa pieza era tan grande, decidí recoger firmas para que la Venus estuviese en interior en lugar de estar en el patio del palacio.

 Me propuse hacer manifestaciones y hubo gente que participó y colaboró con la causa. Decidí no rendirme y luchar y hacer todo lo posible porque esta maravilla no dejase de ser perfecta. Decidimos ir al Ayuntamiento y exigimos hablar con el mismísimo alcalde para poner solución a esto. Él, en parte, nos dio la solución comentándonos que en la primera planta del palacio había una habitación en mal estado y que, debido a la crisis, no podían arreglar. Nos planteamos ir más allá hasta poder hablar con la UNESCO. Y al fin lo conseguimos, conseguimos hablar con ellos y así alguien nos hizo caso. Con lo que habíamos recaudado con campañas y actividades y con ayuda de la UNESCO, pudimos arreglar la sala de la que el alcalde me había hablado, y la Venus se alojó allí,aunque no por mucho tiempo. Nuestra campaña fue tan escuchada que incluso pudimos comprar un terreno anejo al palacio donde pudimos renovar la identidad del museo.
Fue una larga lucha de manifestaciones, huelgas, reuniones y sobre todo discusiones que tuvieron un fruto mayor del esperado.

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